A los indigentes y gente de escasos recursos los percibía como gente muy "lejana" a mi. Seamos sinceros, nadie se va a chupar con el cabron al que le diste 2 varos para que te limpie el parabrisas o 10 por cuidarte el coche.
El invierno recorría Buenos Aires, Argentina. Me encontraba caminando por la fría calle de la Florida allá en el centro, un lugar muy peligroso para caminar por esas horas.
Pues resulta que a mi cuate y a mi, nos abordó un vagabundo, sucio, con una sudadera vieja llena de tierra, pero que se veía calientita. Traía una botella de 2 lts de refresco vacía rellenada hasta la mitad con vino. Apestando a alcohol, y ebrio como un irlandés en el día de san patricio, llegó con nosotros a decirnos que no eramos de ahí, que que pasaba.
Asustados, mi cuate Chente y yo aceleramos el paso camino al hotel. Pues el vagabundo no nos dejaba. -En la madre güey, este cabron nos va a quitar la lana- el vagabundo se presentó educadamente al notar nuestra preocupación, - Soy Johnny, yo vivo en las calles, se las voy a presentar- Verga. Yo no quería ni que me presentara una hermana, la neta.
Camino al hotel el gaucho borrachín nos palticó de su vida, que vivía su madre en el barrio donde vivió Maradona, que tenía problemas y por eso vivía en la calle, etc etc
Nos dió confianza y dejamos que nos llevara a algún bar. Pinche Johnny, nos llevó al Obelisco, A los teatros (y dejenme decirles que para ser un vagabundo que cultura arquitectónica poseía acerca del estilo estructural de los edificios del centro de aquella ciudad) Pues chingón, nos llevó con unos polis, y le contamos que queríamos chupar. Ya era como la una de la mañana y encontramos un bar abierto, Pinche Johnny traía un pedo marca diablo.
Ni me acuerdo el nombre del bar al que fuimos pero pues entramos y nos dieron a probar un chupe característico de la región, Tía María se llamaba, y Johnny nos advirtió que era un trago muy fuerte, que el los 15 de su hermana todos empedaron con un vaso de ese trago....
Lentamente llegó la mesera sonriéndome, vi todo en cámara lenta, un trago en un vaso old-fashion, con sólo 2 hielos, de color un ambar, tal vez un poco mas obscuro.. -SALUD!- acerqué el vaso a mi boca... lo pruebo y......
MIS HUEVOS SON TUS OJOS JOHNNY!!! con razón te empedaste con vino, era un licor tipo baileys, bien suavecito, para el arranque.
No cabe duda que el mexicano aguanta un chingo de chupe, Chente y yo nos chingamos dos tias marias y el pinche johnny ya no podía ni con su alma... ni paper.
Nos regresó al hotel el vato este y de camino, justo enfrente del obelisco una gang de como 6 morros nos aborda para robarnos, pues pinche johnny buen pedo se rifó, y los morritos se fueron corriendo... a huevo.
llegamos al hotel y el vagales nos pide lana para un taxi... encima de que nos sacó un varo por el pomo quería mas varo! nos valió madres y le dimos unos 30 pesos de allá, después de todo si no hubiera sido por el los morros nos lo hubieran robado... nos dió su teléfono y su email (vagabundo ocn email, alla la internet abunda muchos cyber cafes) pero como los escribió borrachos no entendimos ni madres.
Ni pedo, estuvo chingón, decir que tuve un amigo vagabundo.
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