"los sueños, sueños son"...

El día que transcurre no es el día de hoy. Empieza a anochecer, y presentí que era momento de irme a mi casa. Me despedí de todos los presentes en la fiesta, que por cierto había estado malísima.

Fue una reunión con amigos de la universidad y estudiantes extranjeros, en la casa que rentan para vivir. Todos parecían aburridos, todos sentados, tomando, como si no hubiera otra cosa que hacer. Un buen amigo se encontraba sentado en las piernas de alguien que en mi vida había visto, y la hermana de un amigo, sentada arriba de ellos. Mi amigo la rodeaba con el brazo derecho por la cintura, mientra que con la mano izquierda le levantaba su blusa y le acariciaba los senos. Los pezones los vi claramente, eran como de una mujer en lactancia.
Decidí largarme.

Al salir de la casa me despido a lo lejos de algunos amigos, subí a mi coche y me arranqué.

Era muy temprano para llegar a casa, pero demasiado tarde para volver a la fiesta. Mi camino cruzaba por en medio de una casa, pero las rejas estaban cerradas. Otros amigos se encontraban en la mesa de jardín de aquella casa y sus padres, como siempre en la sala, platicando. Les pedí de favor que abrieran las puertas para que pudiese cruzar la casa con mi coche, pero sólo se burlaron de que no podía contener mi ira.
Bajé del auto y comenzé a patear la reja, que media aproximadamente 1 metro de ancho por 1 de alto. No comprendía como mi coche, un Peugeot, pasaba por ahi, pero lo había hecho en anteriores ocasiones.
La reja cerrada, mi coche sin pasar. Decidí unirme a los integrantes de la casa y platicar.

Subimos a la azotea. Tomando Vodka con jugo de uva, se unieron los vecinos, que por lo que noté , no tenían mucho dinero. Ahora si era tarde, debía ir a casa. Bajé de la azotea, y dentro de la casa me topé con mi ex- jefe y buen amigo, estaba raro. Primero, no tenía idea que conocí a los papás de mis amigos, pues estaba con ellos, y segundo, lo veía muy borracho. Me dijo que mi futuro de publicista era prometedor, que me agarrara los huevos. Quize llevarlo a su casa, pues estaba muy tomado, pero no me dejó, conseguí convencerlo de que nos fueramossiguiendo camino a su casa y accedió. Tomé mi coche, y me fui de mi segunda visita, camino a casa.

Iba bajando por la Avenida Palmas con dirección hacia el periférico. El Jetta de mi amigo se empezaba a mover de lado a lado, y de pronto vi un objeto voluminoso en el carril de en medio de la avenida de tres carriles.
El objeto era rectangular, de aproximadamente 30 cms de altura y 20 de ancho. Mi mirada se concentró en esa especie de caja metálica.
Al levantar la mirada de nuevo a los tres únicos carriles, veo dos patrullas a toda velocidad en sentido contrario. Venían directo hacia a mi. No sabía que hacer, ya que si daba el volantazo, corría el riesgo de morir estrellado en un árbol del camellón. Las luces empezaban a hacerse grandes conforme pasaban las milésimas de segundo. De pronto las luces se mueven a mi derecha, las dos patrullas de policia me esquivaron. Salí ileso.

Me encontraba confundido, me encontrba asustado. ¿Porque iban en sentido contrario y a esa velocidad esas patrullas? Yo venía de su destino, y no pasaba nada malo. ¿Estarían huyendo de algo?
Vaya sorpresa que me llevé al llegar al acercarme al periférico. gente huyendo, las calles rotas, rocas volando, el pavimento quemandose, explociones por doquier, humo, fuego; mis pensamientos se mitigaban con el gran ruido de las alarmas, sirenas, gritos de horror y llantos.
Estaba mas desconcertado que nunca, voltee a ver la ciudad, estaba destruida. No sabía que pasaba, el puente por el cual debería pasar, ya no existía. Sólo quedaba un gran agujero, que descubría el sistema ferroviario subterraneo.

Sin querer, me metí a una gran velocidad en mi coche. No veía coches, sólo gente corriendo. Era el caos. La peor de las pesadillas. Sabía que mi muerte se aproximaba, sólo era cuestión de tiempo. Debía seguir manejando aunque esto implicara atropellar personas, para osbrevivir. Mi auto no aguanto aferrar los neumáticos al piso recién encerado (antes de ocurrir el juicio final) giro 360 grados.
Algo extraño sucedió. Yo ya estaba afuera cuando vi como giraba mi coche, y como se incendiaba, una señora salió de este en llamas, la ropa sintética se le pegaba a la piel, provocando a ella una muerte lenta y segura.
No tenía tiempo para hallar razón a este raro fenómeno. Debía huir.

Pequeño coches de fórmula 1 , de unos 40 o 50 cms de largo, eran manejados a control remoto, persiguiendo personas y matándolas. Me uní a la multitud que huía despavorida, y a mi izquierda me abordó un pequeño coche verde. Pensé que era mi fin, pero decidir huir.
Corrí tan rápido que perdí al coche. Llegué a un pasillo largo, lipmio de color balnco y vi una puerta, decidi refugiarme ahi, pero al tratar de entrar un policia empezó a sacar su pistola con intenciones de uqitarme la vida si me atrevía a entrar, decidí no hacerlo y seguir mi camino.
Llegué a una zona de regadera, no se como, tal vez alguna pared subterranea fue derribada y ahora me encontraba en el sótano de algún club social. Se me denegó la entrada por no estar desnudo con una toalla envolviendo mi cintura. Seguí corriendo.
Ahora los mingitorios me rodeaban. ¿Dónde estaba? no había tiempo para deducirlo, pero si para orinar, para aguantar mas en mi huida. AL orinar vi que no era un mingitorio normal, era de cierta forma extraña con un botón que ne mi vida había visto. Pensé que podría estar en el futuro. Giré mi cabeza a la izquierda y vi uno común y correinte, pero en su totalidad oxidado. Decidí que debía seguir mi camino a casa.

Al salir a la superficie me encontré con una compañera de la oficina y me confesó no sbaer lo que pasaba, ya qu eno había medios de comunicación. Descubrí que ella vivía cerca dce casa, así que emprendimos el viaje de regreso juntos.

La violencia se calmó de un momento para otro, y constructores sdalieron por todos lados; la ciudad no tenía tiempo para destrucciopne,s todos salieron a reconstruirla, todos entonando la misma melodía. No recuerod que cantaban, pero algo decían de que los mexicanos unidos siempre son mayoríá y ni los gringos , ni los izquierdistas podrían separarnos.
El paviemnto, estaba fresco, estaba siendo reocnstruido por millones de personas en overoles azul marino.

Por fin llegué a casa. No había sido víctima de tantos destrozos, pero había muchas personas reconstruyendola por dentro.
Ya una vez teminada, se fueron a reparar la siguiente. Decidí dormir, pero no podía. Me levanté de mi cama y presioné el apagador el la luz. No funcionaba.
- Maldita sea, reconstruyeron esto de manera parcial - pensé
encontré como prender la luz y lo hice, me asome por la ventana y todo era destucción, las casas de enfrenté se habían reducido a tuberías. Parecia que había pasado un tornado. Que horror. Junto a mi ventana habían muñecos de los personajes de los simpsons, seguramente de algun vecino. pensé que era de mi vecino de a lado, ya quye su casa estaba hecho añicos.

Que pesadilla, quería llorar.
-Puede ser un sueño - me dije a mi mismo - no, no creo - mire de nuevo hacia la ventana - no, si es real, esto no puede ser falso, ¿estaré soñándo? -
recordé que para ver si sueñas, te debes pellizcar, si sientes algo, es real, si no, un sueño, decidi hacerlo con gran fuerza, una y otra y otr y otra vez. No sentí nada.
- si, a huevo, es un sueño.
Quería verificarlo, quería asegurarme que esta asquerosidad fuese un sueño y corrí al cuarto de mis padres.
Que raro, mi papá dormía en donde mi mamá ha dormido toda la vida y viceversa.
- Papá, despierta - estaba dormido - ¿estoy soñando?
- si, estas dormido
- seguro?
- seguro
- por favor despiertame, quiero huir de este lugar
Mi papá empezó a hacer aire con las sabanas de su cama hasta que abrí los ojos, desperté en la realidad, pero el sueño era muy duro, volví a cerrar los ojos y regrese al mundo horrible
- no papá, no funicionó, volví a dormirme
repitió la operación hasta tener éxito.

Estaba despierto, en al realidad. Sólo había sido una pesadilla, la peor de mi vida. No quise volver a dormir, pero lo tuve que hacer. Recordé los problemas políticos y sociales que pasan en mi país.
Ahora tengo miedo, tan cerca del informe presidencial. A ver que pasa, se que es una pendejada que mi sueño se haga realidad, pero sería horrible, ya que ya viví como sería una guerra civil.

"Los sueños, sueños son"
- Calderón de la Barca